El sistema nervioso en el proceso de despertar

El Sol Central esta irradiando rayos ascensionales de Luz Platino, Turquesa y diamantino que a su paso van ocasionado cambios en los entramados energéticos del Planeta y de nuestro Sol. Las tormentas solares y los cambios en el campo electromagnético de la tierra son el resultado de estos cambios en la frecuencia Planetaria por la cual estamos atravesando junto con la Madre Tierra a medida que nos adentramos en la Banda de Fotones.

Se puede decir que todo el entramado energético planetario esta siendo rediseñado y transformado, adaptándose a la nueva frecuencia. Las viejas carreteras de información se están transformando y expandiendo, de manera que puedan conducir mucha mas Luz y energía. 

Como es arriba es abajo, nuestro propio entramado energético también se esta trasformando y es por ello que debemos procurar ir a la par con esos cambios conectándonos con la Rejilla Cristalina de la Tierra, para hacerlos mas llevaderos y cómodos.

El sistema nervioso, esa maravillosa red de circuitos de información cuya función principal es coordinar la respuesta de nuestro cuerpo hacia el entorno; es probablemente uno de los sistemas energéticos de nuestro cuerpo que resiente en gran medida los cambios vibracionales que estamos experimentando en este proceso de ascensión.

Al ser una compleja red de circuitos eléctricos que traduce y conduce la información a todo nuestro cuerpo, su estructura se va modificando a medida que la vibración de nuestro cuerpo aumenta. El sistema nervioso central se encuentra ubicado en nuestro cerebro y medula espinal, es decir, en los centros energéticos centrales de nuestro cuerpo. Por lo tanto, el sistema nervioso es  nuestra red energética primordial a través de la cual la Luz e información proveniente del Universo es canalizada hacia los centros energéticos o chakras.

Cada vez nos adentramos profundamente en la banda de Fotones, la frecuencia de la tierra se ha elevado muchísimo en este tiempo y eso implica que todos nosotros somos sensibles a los cambios energéticos y electromagnéticos por los cuales estamos atravesando como colectivo. La Luz intensa ha modificando las viejas estructuras, renovando todos los entramados energéticos planetarios para que podamos entrar de lleno en las frecuencias mas elevadas de Unidad, canalizar información y ser conscientes de los Planos sutiles del Ser. Estamos sin duda alguna, evolucionando.

Es común que en estos tiempos frecuentemente nos encontremos sintiendo malestar en nuestro sistema nervioso, debido a que no logramos asimilar completamente todo ese caudal de energía que recibimos.

Palpitaciones, dificultad para dormir, dolores de cabeza, tics nerviosos como el morderse las uñas o rascarse la piel e incluso movimientos involuntarios en la cara o cuerpo cuando meditamos, son síntomas de que no estamos canalizando las nuevas energías apropiadamente a través de nuestro sistema nervioso. Es decir una parte de nosotros, en este caso, nuestra mente, continúa resonando con el viejo tiempo de la 3D, mientras que nuestro sistema energético por si mismo ya se ha alineado a la Nueva energía. 

Esto significa que nuestra mente continua asiéndose fuertemente a los viejos patrones energéticos a los cuales ya estábamos habituados. Continuamos tratando de vivir de acuerdo a las viejas energías regidas por el tiempo mecánico y agendas, aunque todo nuestro cuerpo energético ya esta adentrándose profundamente en las nuevas frecuencias del No tiempo.

Tratar de vivir en ese espacio del tener que hacer. Midiendo nuestra productividad de acuerdo al tiempo mecánico y tratar de sostenernos en las viejas agendas ocasiona que el sistema nervioso se desestabilice y pierda su centro, su calma y su Paz. Es necesario que nos hagamos conscientes que estamos adentrándonos en un nuevo espacio tiempo, donde el eterno presente se manifiesta como una sensación de profunda calma y serenidad. Que nos tomemos por lo menos unos instantes al día para solo SER y recibir. En lugar de Hacer y producir y sobre todo, que nos alineemos al Pulso de la Madre Tierra y nos centremos en el corazón,  para que nuestro reloj interno y nuestro Sistema nervioso reciban las oleadas de nueva energía y Luz apropiadamente. 

De esa forma despejaremos las rutas neuronales de  nuestro cerebro permitiendo que nuestro Sistema Nervioso se sane y adapte a las nuevas frecuencias.

Los Delfines nos están asistiendo en este proceso. Ellos irradiando ondas sónicas directamente hacia nuestra Glándula pineal y de ahí hacia nuestros canales, pero en especial a través del Canal Delfinico de Energía que se ha activado en nuestro cuerpo energético desde el pasado 8-8-8 (mas info aquí) alinean nuestro Sistema nervioso para que nos sea mas fácil recibir y adaptarnos al nuevo tiempo y espacio dimensional en el que YA nos encontramos.

Esta imagen que les comparto corresponde al Cristal de Agua que el Dr. Masaru Emoto fotografió como resultado de exponer el Agua a una fotografía de Delfines. La imagen fue extraída del Libro “El Agua, Espejo de la Palabras” del Dr. Masaru Emoto.

En la Imagen se menciona que el centro del Cristal se parece a la Glandula Pineal.. Y es así, porque el Sonido y la Frecuencia de los Delfines estimula y activa el Cristal Multidimensional en  nuestra Glándula Pineal. Este Cristal es el encargado de traducir las pulsaciones cósmicas que recibimos como información, enviándolas hacia nuestro cuerpo y consciencia como ideas, imágenes, sabiduría, percepciones, etc.

Este ejercicio nos ayuda a alinear nuestra Glándula Pineal y nuestro Sistema nervioso, es muy sencillo y lo  podrán realizar cada quien a su tiempo y manera...

 

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